7 de mayo de 2014

POESÍA / "Urbano", de Jorge J. Flores Durán






URBANO

(Cinco entregas y un epílogo)



I - Hablas desde el teléfono


Estridente y silenciosa
como los golpes de la vida
hablas desde el teléfono
para decir que no vienes.

Entonces te respondo,
que está bien, luego hablamos.

Es que murmuras
-No ha sido mi intención.

Yo sé que esperas que diga
si quieres yo voy.

Más silenciosa que estridente
como la luna en las esquinas
respondes:
-¿Qué haces?- dices
-Nada- respondo
-¡Es que no puedo ir!- insistes
-¿Qué haces- dices
-¿Qué haces?- dices.
Ahora sé que estoy en tu corazón.

Continuará...



II - Hablas desde el teléfono 

De lado a lado
como un barquito de papel
espera el llamado:

-¡¿Aló?!, estás enojado...
-No, no lo estoy,
solo... solamente
comencé a retirar la cena.
-¿Por qué lo has hecho?...
- Simplemente porque no vendrás.
-Tan rápido asumes la ausencia,
te he dicho que lo intenté, intenté ir.
-El resultado es el mismo, no vendrás,
¿qué sentido tiene cenar solo?
Ya las noches son largas,
para qué retenerlas.
-Te juro que traté de ir.... ¿qué habías preparado?,
dime, ¿qué habías preparado?
Dime.


Continuará...


III - Hablas desde el teléfono 

Cómo esperando un regalo
a los pies de un árbol
responde el teléfono:

-¿Aló?

-¿Qué habías preparado?
-Era una sorpresa.
-Fue un día muy difícil,
no tuve tiempo de arreglar mi horario,
si hubiera sabido, quizás.

Alguien le pregunta a la noche
porqué es muda:

-Si hubieras sabido, ya no sería sorpresa.
-No seas pesadito pareces un niño
-Qué quieres, si me has dejado plantado.
-¿Qué habías preparado?
-Y dale que dale con misma pregunta.
-Niño engreído y cocinero.
-Me haces reír con tu forma de hacerse perdonar.
-No tengo culpas para pedir perdón.
-Solo te diré que tengo un vino blanco bien seco en la heladera,
el resto lo debes imaginar.
-¿Imaginar? estoy muerta,
horas de oficina, horas en terreno
¿y me pides imaginar?.
-Creo que descorcharé el vino,
¿dime, voy por una o dos copas?
-No te atrevas abrir el vino,
no te atrevas...

Continuará...


IV - Hablas desde el teléfono

- ¿Aló?

- En qué quedamos ¿vienes o no?
- Has abierto la botella?.
- Aún no...
- Porqué no lo hiciste.
- No encuentro el saca corchos...
- Esperaba una respuesta mas, mas romántica.
- No das tiempo, tampoco a la paciencia,la botella está aún ahí,
 a la espera como una sombra.
- Te lo dije no pude arreglarlo el trabajo ¡pero si ya lo explique!.
- Entonces porque insistes en que no abra la botella…
- ¿Continuas enojado?
-No, no lo estoy
- ¿Arrogante?
- Y tu curiosa?



Continuará...


V - Hablas desde el teléfono


- ¿Aló?
- ¿Por qué no vienes?
- Repítelo…
- ¿Por qué no vienes?
- Repítelo…
- ¿Por qué no vienes?
- ¿Lo deseas…?
- Sí, lo deseo….
- ¿Por qué?
- Ya te lo dije: Lo deseo
- Repítelo…
- Lo deseo
- Repítelo…
- Lo deseo
- Me has hecho reír
- ¿Por qué no vienes?
- Repítelo…
- ¿Por qué no vienes?
- ¿Aún está el vino?









Epilogo


I.-

Pasaron los años, como tantas hojas sobre los autos cuando pernoctan cerca del los arboles.
Nunca sabremos si la botella de vino se destapó o no, son esas preguntas de las que no se desean respuestas. Ella junto a su familia, esposo, hijos, hijas siempre se alegra cuando alguien abre una botella de vino. Alguna vez relató el motivo:
-Es lo más hermoso que alguien te ofrezca el amor con vino blanco.
Se emociona hasta las lágrimas, como los ríos al caer una nube en su espalda.
- Todas las mujeres deberíamos alegrarnos, que nos seduzcan, que nos deseen.
El también, tiene recuerdos del vino, pero cada vez que alguien abre una botella mira siempre por la ventana y se pone de pie, como un susto, como un ruido, su mujer un día le preguntó el motivo de su tristeza.
-Fue hace muchos años atrás, estaba haciendo la tesis e invité a una vecina a cenar, no sabía que vino comprar, es eso.
Su mujer sabe que guarda un dolor, es la única persona que se entristece con un vino.

II.-

El debe comprar un vino para la cena, se lo encargaron a último minuto, rápidamente se dirige a las góndolas y nuevamente le vuelve la inseguridad, piensa y piensa como alguien haciendo una apuesta, pero no lo puede creer, encuentra el mismo vino que nunca abrió.
Ella está cocinado y se percata que falta vino y le pide al esposo que baje a comprar una botella.

- No puedo mi amor, estoy bañando a los niños, vaya usted.

- Bueno yo iré.

Apurada va directamente a las góndolas de los vinos, de izquierda a derecha revisa las botellas, buscando una con el mejor marinaje para la cena, Cuál es su sorpresa al ver en la góndola el mismo vino blanco que nunca tomó. La sorpresa aún siguió al constatar que solo quedaba una sola unidad. Ella la toma con su mano de inmediato, no dejaría pasar nuevamente esa oportunidad en su vida.

III.-

El, que había desistido en comprar la botella de vino, se arrepiente y desde las cajas del supermercado corre hacia las góndolas. Entra en llanto al ver que la botella ya no estaba.
Al final del pasillo ve a una joven mujer con la botella en la mano y le grita:

- Esa botella es mía, es mía.

Ella al escuchar los gritos se gira hacia él, y se quedan mirando fijamente a los ojos. Ella le responde:
-Ya no es tuya -mientras la abraza la botella al lado de su corazón. -Si la quieres .. ven, ven por ella.

IV.-

Continuará...ha sido la palabra de esta historia. La vida continúa, con o sin nosotros. Las oportunidades pueden pasar sobre nosotros y no volver más. Nuestros personajes siguieron sus vidas, ahora la vida les ofrece otra oportunidad. ¿Cómo esta historia puede continuar?


Nota del autor

El poema Urbano, usa el lenguaje narrativo de las historietas de los años 60. Historias que debían continuar una semana después con la publicación del próximo número de la revista, el uso de Continuará remplazando el FIN, permitía al lector imaginar e involucrarse en la narración, es lo que se buscó también en Urbano. La estética del poema es una cita de los personajes Pierre y Mireille del curso de francés de audio y diapositivas que se ofrecía en Francia en esos años.



Jorge J. Flores Durán

http://jorgefloresduran.blogspot.com/

1 comentario:

Jorge Flores Durán dijo...

Muchas gracias Amanda por difundir mi trabajo
Habría que corregir en el poema III dice Halo y debería decir Alo
Un abrazo fuerte


Jorge.