29 de abril de 2010

NARRATIVA / Arjex






No me platiques más



Me gusta escuchar boleros en mi walkman mientras camino por la ciudad, me gusta porque la dulce y suave melodía me evoca sonrisas amorosas, besos furtivos y apasionados atardeceres, pero también, me gustan las guitarras fantasiosas y tristes que traen a mí una lágrima guardada; y como un bálsamo fresco y cálido a la vez, recuerdo que siempre se puede volver a amar. Y así voy con paso filosofante escudriñando los rostros en mi camino, algunos simulan una frialdad de billetera abultada, otros guardan lagunas brillantes a punto de desaparecer en un beso, los demás esconden su necesidad de amar con una supuesta indiferencia. Pero quizás en medio de esa selva atiborrada de dinero por gastar, encuentre a una bella dama que en el instante del encuentro con sus ojos, yo sienta que a sus oídos fluye la misma melodía y en sus labios pueda leer la letra de “No me platiques más”.

ARJEX
Publicado en La mancha 15 /UNO

Ilustración de Arjex




José Eduardo Chávez, escribe bajo el nombre de ARJEX. De profesión Ingeniero Ambientalista, vierte en la literatura y otras artes, toda la inquietud creadora que, de una u otra manera, logra plasmar con acierto para dar cuenta de sus singulares perspectivas. Quilicurano de corazón, leal colaborador de La Mancha y finalista del Primer Concurso de Poesía Joven, ha publicado allí y en varias revistas virtuales lo que le dicta su sensibilidad, sobresaliendo en ello los temas concernientes a la naturaleza y su problemática. Próximamente, prepara la edición de un compilado de microcuentos.

25 de abril de 2010

NOTICIANDO / Encuentro con Pía Barros




El día jueves pasado, en nuestra Biblioteca Municipal de Quilicura, tuvimos un encuentro con la escritora Pía Barros, esto, como parte de la celebración del Dia del Libro. Por nuestra parte, a Pía ya la conocíamos y habíamos compartido con ella en otras tertulias tiempo atrás, sin embargo, eso no resta ni un ápice lo interesante de escuchar que resulta la autora y como, por medio de vivencias y oficio, va enriqueciendo su palabra hasta lograr, sin esfuerzo, una empatía tácita con el público asistente que no vacila en hacerse parte de la dinámica e interactuar por medio de sus preguntas e impresiones. Interesantes, entretenidas y enriquecedoras por demás resultaron las respuestas y comentarios de Pía acerca de cada inquietud planteada por el auditorio, así como su acertiva lectura, concentrada en uno de sus últimos libros: Grandmother y otros cuentos.
Agradable momento el que vivimos aquí, en nuestra Quilicura y , además, representando de muy buena forma nuestro trabajo "manchado". Se agradece a Isabel Aragón, directora de la Biblioteca, por toda su gestión para concretar este hecho y a quienes laboran con ella poniendo todo su empeño en ello.
El detalle a corregir: la poca solidaridad entre los usuarios que comparten espacio en este recinto, ya que, tal como nos ha tocado vivir otras veces, hubieron otras actividades que no atinaron con bajar el volumen de su trabajo, interfiriendo desagradablemente el desarrollo de la tertulia. Falta, falta tino y respeto por el quehacer del "otro".
Y para compartir con ustedes, imágenes del momento y uno de los cuentos de Pía que más impactó aquella tarde:





A MODO DE MORDAZA


Sé que lo encontraron con un papel en la boca, como a manera de mordaza, con el barro enturbiándole los rasgos y la mirada azul ya sucia de ver su propia sangre derramada.
Fue un drogo que pensó que estaba borracho y algo podría esquilmar de sus bolsillos, pero hasta los angustiados se ponen respetuosos con la rigidez de la muerte, y pidió a los vecinos que avisaran que había un finado obstaculizando el paso, y algún niño podría no verlo en mitad de la lluvia y después tener pesadillas por haberse tropezado con un cadáver.
Aún el asombro le raspaba las comisuras de la boca abierta, por donde un hilillo de saliva se confundía con los regueros de lluvia que caía leve, limpiándole el barro.
Pero si estiran el papel arrugado, podrán ver que es un billete de los grandes, más bien un puñado de billetes grandes taponeándole palabras que ya no puede decir.
Tenía puesto aún el traje oscuro con el que se lucía los domingos en la misa, el traje de los discursos y los funerales, con el que salía en las portadas de político bueno. Las mismas portadas que dirán que hemos perdido a un hombre justo.
Pero revisen más abajo, entre sus piernas, para que vean la mordida. Miren bien, no estará en los noticieros, ahora, antes de que sea tarde, la huella de unos dientes pequeñitos, porque la Chana tiene todavía los dientes de leche, y una rabia sorda por las historias acumuladas de todas las niñas del barrio. El fajo que le pagó el senador lo hicimos un puño de papel, y se lo pusimos en la boca entre todas, porque así nos habíamos sentido siempre y queríamos que el supiera lo que sentíamos: un puñado de billetes a modo de mordaza.




Pía Barros Bravo (nacida en Melipilla, Chile, 1956) es una destacada escritora chilena. Su obra, en constante cruce con el feminismo postdictatorial y las artes visuales, se ha traducido en la escritura y elaboración de variados textos y libros-objeto que integran el trabajo de destacados artistas gráficos, lo que le ha valido la obtención del Fondart (Fondo Nacional de las Artes) en dos oportunidades. Es directora, desde 1976, de los talleres Ergo Sum y de Ediciones Asterión.
Ha publicado una treintena de libros-objeto, con material literario ilustrado por destacados artistas gráficos. Por sus talleres literarios, que destacan entre los de mayor prestigio en el ámbito de la literatura, han pasado una infinidad de alumnos.
Obtuvo también la Beca de la Fundación Andes, con la que escribió la primera novela de difusión digital en Chile, Lo que ya nos encontró, y la Beca del Escritor, del Consejo Nacional del libro y la lectura.

21 de abril de 2010

LETRA NUEVA / Animal Cautivo, de Lila Calderón




A
yer, junto a Nancy Molina decidimos enfilar los pasos hasta la Biblioteca Nacional, concretamente, a la sala Alonso Ercilla (¡bellísima!)en donde se realizó la presentación del libro ANIMAL CAUTIVO, de Lila Calderón. Este acto estuvo presentado por el artista visual Mauricio Vico y por el poeta Gonzalo Contreras, quien sabiamente anticipó parte de cada tema que la autora desmenuza en esta publicación. Luego, Lila presentó a Omar Ponce y comenzó su lectura.

Hemos estado, afortunadamente, en muchas y variadas lecturas y presentaciones de libros, y en cada una de ellas hay elementos a resaltar y otros, a perfeccionar. Esta vez, primera en que escuchamos a Lila Calderón, tuvimos la suerte de formar parte de un momento especial en lo que a ambiente y calidad se refiere. Hay formas y formas de presentar el arte y la visión de cada cual, y en ello se esmera el artista tratando de imprimir su propio sello en cada uno de los detalles. Esta, la de Lila, fue un acierto de sencillez, prolijidad, calidez y veracidad en cada uno de los gestos que, sin lugar a dudas, conmovió e impactó gratamente a todos los presentes.
Mención aparte merece el bello libro que hace de digno soporte para la cara palabra de Lila. Un acierto de diseño y realización a cargo de dos jóvenes estudiantes que junto a la autora decidieron cada detalle del espacio, forma, color, tipografía y hasta la intensidad de la impresión para no perder la esencia de la idea: ese animal cautivo que yace, sub-yace y permanece dentro de cada ser vivo.

Nos devolvimos – Nancy y yo - a casa con una sensación de agrado muy particular en nuestro interior... algo especial, entre etéreo y subterráneo – si es que se puede explicar así – y ello me acompañó durante el recorrido hasta Quilicura, tanto, que sólo bajé de mi nube cuando subió un par de jóvenes -hombre y mujer – a cantar al bus. Escuché un poco, aquilaté sus voces...y me impactó su realidad. Me fijé en la mía, en la de la anciana que dormitaba de cansancio a mi lado y pensé si tenía un sentido lo que pasaba hasta ese momento: ellos recolectando monedas para seguir estudiando, Nancy y yo juntando las nuestras para asistir a la presentación de Lila, la mujer agotada de pie, el hombre serio del frente, los pasajeros, en suma, el hastío del chofer, los estragos del terremoto y hasta en la gente que todavía está en carpas más al sur. Pensé... en el peso de las cosas cotidianas y en la importancia que le otorgamos cada cual. En todo eso pensé en medio del canto de los jóvenes, y fue entonces que comenzaron a cantar una canción de Silvio que dice en alguna parte: “la era está pariendo un corazón”... y ello me sacó del mar de dudas que tenía en la cabeza: entendí (o creí hacerlo) que estaba bien, muy bien lo que cantaban, porque todo lo que sucede hoy en día es a causa de que la tierra está pariendo cosas nuevas, está pidiendo cambios o manifestando su disconformidad, no lo sabemos bien, pero tendremos que vivir con ello y enfrentarlo y tratando de comprender el lenguaje de nuestro entorno y, para ello..¿qué mejor que hacerlo con el lenguaje universal de la poesía? Me felicité, entonces, de haber dedicado gran parte de mi tiempo a aprender su lenguaje, felicité sin palabras al par de cantantes , a Silvio, por la canción y a Lila por su aporte a la poética en general, poderoso incentivo que logra hacer pensar (y olvidar las pellejerías) a un ser humano común y corriente durante un rutinario viaje en un bus del Transantiago.




Amanda Espejo

Fotografías: Nancy Molina



Lila Calderón. Santiago de Chile, 1956. Comunicadora Audiovisual y Escritora, Magíster © en Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Chile. Ha publicado los libros de poemas Balance de blanco en el ángel triste de Durero, 1993; In Memoriam, 1995; Por suerte había otra vida y Piel de maniquí 1999. Durante el año 2002 publicó los libros: Animalia (cuentos), La gran fuga (cuento) y La ciudad de los temblores (novela infantil), Ediciones Books and Bits, Santiago, Chile.
En 1994 obtuvo el Primer Premio de Video-poesía de la Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile y el Premio de Adaptación de Guiones de Cortometraje Luchino Visconti del Ministerio de Educación.
En 1998, obtuvo el Primer Premio en el Encuentro de Cine y Video del Caribe con La muerte de un poeta, homenaje al poeta cubano Ángel Escobar (Video-experimental). Ejerce la docencia en la Universidad Diego Portales y en Arcos. Su obra poética se encuentra compilada en diversas antologías, tanto de Chile como del extranjero.



Área de difusión cultural de revista LA MANCHA.

19 de abril de 2010

POESÍA / Elisa Alcántar




AIRES DE LIBERTAD


C
uando el viento cambia
la dirección de mi barca,
todo este horizonte desaparece
se quiebran las ideas hechas
se elevan las velas del deseo.

Cuando el viento sopla
la bandera de mi barca,
ésta flamea rebelde.
todas las verdades se renuevan
todas las sombras se disparan.

Cuando el viento susurra
en la proa de mi barca,
el tiempo desaparece
su beso seduce este timón
y libera toda ancla oxidada.

Cuando el viento cesa
en la cubierta de mi barca ,
todo se repliega hacia la bodega
hacia la oscura madera
de mi pálpito terreno.




ELLA
(mujer guitarra)


Aunque mutilada su voz, ella aún canta,
aún resuena por las peñas
toda su tormenta
toda su bravura ,
todo el calor de sus pasos
deshaciendo los guijarros
que se amontonaron en la vía de su corazón.

Ella
la que con su razón voló al otro lado del espejo
para desentrañar toda la maraña de miedos
y en sus despojos de novia rota se reinventó.

Ella
La que comprime sus ideas cuando le ametrallan
su emoción , aún canta.
La que remendó todos los vestidos de la noche
con sus ilusiones vendidas ,con sus lágrimas empeñadas.

Ella
que persigió cada quimera iluminada
como si fuera la última alegría
la última gloria.
Su voz mutilada no se declara inválida
su voz suena más clara que nunca.

Ella
la que parió los versos en fuegos y en humedales
la que remeció mis pilares ,
la que reveló a mi existencia toda la pavura
de la despiadada sombra del olvido.

Hoy en su auxilio quiero correr
y decirle en su lluvia de cuerdas
que a los olvidos pude resistir
que su voz retumba y taladra
en los pechos y en los lechos
de los que aman todas las palabras.

Ella; me recorre y me socorre
cuando por las noches
el pensadero se derrama
y quiero volar en cualquier nota
de su vientre
cuando algún recuerdo
se des
gra
na.



Publicados en La Mancha 15 /UNO

Elisa Alcántar Cereceda (Lichazul). Nace en Santiago de Chile 1965. Aprendiz de lirio - como ella misma se denomina - asiste en la actualidad al taller de literatura con el poeta Ricardo Sánchez, de la Biblioteca Municipal de Maipú. Su afán por la literatura se inicia hace algunos años y su trabajo es publicado en antologías del Centro de Estudios Poéticos de España, además de revistas como: Sabor Artístico de España, La Mancha de Quilicura y Antología de Taller 2008, Maipú. También tiene su libro experimental editado por Editorial Lu Lu .com. en el 2009. Este año publica su poemario Veinte Deseos y una Luna Rota (Ediciones del Taller).

15 de abril de 2010

LARGA DISTANCIA / Ian Welden, desde Dinamarca



Parte de: PEQUEÑO POEMARIO DE AMOR, AUSENCIAS Y DISTANCIAS


PEQUEÑO POEMA DE AMOR


Una cosa hermosa
asombrosa
qué alegría!
crece en mi calle
vengan a verla
niños
vecinos
amigos
presidentes
es curioso como trepa
abriéndose paso
por el pavimento de mi pecho
desde el otro lado del mundo
desafiando a las leyes
buscando mi sol y mis lunas
sin usar los codos
tranquila y suave
húmeda
me atrapa
me besa
me traga para siempre.



EL GOLPE


Está empezando a llover
y hace frío también
la noche es la noche de siempre
el día queda tan lejos
más cerca de tu boca que de la mía
y sin embargo no me rebelo
espero la eterna espera
de los desesperados
algún movimiento imprevisto
de las manos
un gesto de impaciencia mortal
un milagro violento tal vez
o un solo golpe de puño
sobre nuestra mesa tan frágil
que ponga fin de una vez por todas
a nuestras magras citas en el viento
y lo transforme todo
en simple carne y hueso.


INJUSTICIA


Me sucede a veces que vuelo
sin querer
me encuentro sobre tu tejado
en ese lejano país tuyo.

Generalmente ocurre en las noches
cuando estoy desprevenido
absorto en algún recuerdo de mi infancia
construyendo un barquito de papel
o sacándole punta al lápiz
con mi navaja de afeitar.

Y te espío
haciendo tus cosas mientras bailas
mirando hacia el horizonte oscurecido
la lluvia cantándote canciones de amor

Y te espío
escribiéndome un mensaje urgente
ven
que te extraño
que
injusta
es
la
ley
de
gravedad.



IAN WELDEN nació en Santiago de Chile en 1948. Estudió Comunicación de masas y gráfica en la Universidad Técnica del Estado. También estudio cine en la Escuela de Cine de la Universidad Técnica de Santiago.
En 1974 viajó a Barcelona donde, aparte de escribir toneladas de poemas y cuentos que jamás publicó,trabajó como interprete y radiooperador a bordo de un barco quebuscaba petroleo a 15 millas de la costa de Barcelona.
En 1975 viajó a Dinamarca donde clavó su bandera chilena. Aquí trabajó en los campamentos para refugiados de la Cruz Roja, donde, entre muchas otras tareas, coleccionó poemas y relatos de refugiados de casi todos los rincones del mundo. También inauguró una exposición de gráfica titulada "GUERRA MUNDIAL - TERCERA FASE", acerca de la guerra civil en la otrora Yugoeslavia. Ahora, disfrutando su ocio, escribe poemas y relatos cortos que él llama "milagros".

Ilustración de Ian Welden

http://milagroswelden.blogspot.com

12 de abril de 2010

POESÍA / Cristhian Téllez





CARRO TREINTA
Publicado en La Mancha 15 / UNO



¡Ya, los que van pa’ Lira!
Sentenciada estaba, el fin de la gloriada pausa.

Los tres gallanes refunfuñando
apuraron sus cañas frescas.

El cuarto, menudo y enjuto
sin mayor parsimonia sorbía incesante
hasta atrapar el último concho del medio pato.

También sin parsimonia,
pero fiel a su rito republicano
una vez saciada la sed, musitó ¡Muerte a Franco!

¡Ya, ya cabritos que se les va el carro!
Mi abuelo no era de muchas risas
y perdía la paciencia fácil.

Los cuatro parroquianos
tomaron rumbo a ese carro que nunca partía.
rumbo al Lira que no conocían.

Y paso a paso en su salida,
se iniciaba la metamorfosis del día.

Sin alcanzar al sol perdido se alejaban calle abajo.

Oscurecido ya,
la noche era proclamada por un solo de cortina.

Como profetizado en “Lo que cuenta el viento”
cuatro “Viejos del saco” iniciaban sus tropelías
cazando niños porfiados y niñitas mal vestidas.

Quizás sea bueno aquí complementar...

Antes de embarcarse con boliche camas y petacas.
calle Bascuñán al fondo se emplazaba “La Campana”.

Mi abuelo fue desde siempre almacenero.

El carro en mención,
cruzaba de borde a borde ese Santiago antiguo.

¡Los que van pa’ Lira!
Clamaba la boletera aferrada sobre la pisadera.

Mi abuelo no fue a Lira
más bien partió hacia el otro extremo.

Yo, por si las dudas
al “Viejo del saco”
siempre le serví sus cañas bien llenas.




SILOGISMOS DEL MAIPO


¿Puede el hombre entender porqué es hombre?
¿Hay huellas en la arena?

¿Pudo el hombre estar sobre la roca
antes de ser la arena que la soporta?

Desde lo alto del acantilado
Rodó la piedra buscando el mar.

Desde la cordillera lejana el río la lleva al mar.

Ruedan piedras, guijarros,
bríos, vigor.

A tramos la roca se resiste,
piedras y guijarros no

Más en este juego sólo hay un ganador

Y en la mañana del mañana
la roca partirá al mar

Entregando de si su último guijarro al caudal.




Cristhian Téllez, de profesión arquitecto, poeta por esencia. Vive en la comuna de La Pintana; su trabajo poético siempre entrelazado a las imágenes y a las sensaciones que estas proyectan, nos hacen preguntarnos más de una vez, si acaso en su creación fluye primero la imagen o los versos. Prueba de ello es su primer poemario, SÍ, de edición limitada, en el cual la dedicación que demuestra al escoger cada una de las imágenes para compartir las páginas en blanco con los pensamientos que fluyen de su sensibilidad, encuentra un campo abierto al derroche visual y poético.


http://cristhiantellez.wordpress.com

9 de abril de 2010

NARRATIVA / Nancy Molina


LA LAVADORA NO FUNCIONA…


Cuando llegó tan orgulloso con una lavadora automática, supe que no resultaría….. era usada y la habían desechado por vieja, y se lo dije, pero me acusó de ser una mal agradecida; le dije que no comprara cosas usadas, porque era un gasto inútil, pero él insistió, me recalcó el ser mal agradecida, y además soberbia.Vi su entusiasmo al instalarla, vi su orgullo al tener una automática en casa, y su alegría por el magnifico negocio. Sólo le habían cobrado diez mil pesos: era el negocio del año, total los rusos de al lado son ricos y cambian de lavadora sólo porque está pasada de moda, eso dijo mas de una vez, yo no dije nada, sólo observé con calma y traté de compartir la alegría, rogando que tuviera razón, dos años sin lavadora era suficiente para desear que todo estuviera bien, además sería la primera lavadora automática de mi vida.
Fue una tarde eterna, recuerdo que intentaba hacerla funcionar, pero se dilataba el momento por cualquier razón, yo no quería insistir con el tema, así que lo deje solo para que se pudiera concentrar con la instalación del artefacto. Al rato me llamó mostrándome lo equivocada que estaba: la lavadora estaba funcionando, giraba y giraba con una carga de ropa que él mismo había seleccionado del tambor que rebalsaba a simple vista, me alegré mucho y sentí entusiasmo, se retiró satisfecho de su compra y de la instalación a seguir con sus actividades acostumbradas, su trabajo, mientras en el baño la lavadora seguía su eterno girar.
Pasó mucho rato y llamó mi atención que no descargaba el agua ni cambiaba la frecuencia de su girar así que lo llamé. Al inspeccionar, me dijo que estaba todo bien y volvió a sus quehaceres pero nada cambió, siguió girando sin expulsar agua, sin cambiar el ritmo y volví a decirle, pues ya me asustaba. Esta vez me retó, me dijo alharaca, ni siquiera fue a verla.Observé por algunos minutos su rostro contrariado y me fui al baño a ver qué podía hacer con el problema que tenia en ese momento, La examiné, y trate de leer en las desgastadas teclas las funciones, intentando encontrar un stop. Fue inútil, así que simplemente la desenchufé. En ese minuto él entro y me miró en forma muy desafiante, la volvió a enchufar y se puso a mover todo lo que pudo encontrar, luego se acordó de lo principal, el catalogo, su rostro volvió a la vida y yo pude respirar con algo de tranquilidad, había esperanzas de terminar bien el día. Llegó con el catalogo, pero éste estaba en ruso…….todo igual. Y la lavadora con una carga de ropa y llena de agua sucia.
En un forcejeo con la pobre máquina se abrió la puerta y el agua empezó a correr por el baño mientras intentábamos evitar que se mojara el resto de la casa, de pronto simplemente se detuvo dejando que todo se inundara, y como si estuviese hipnotizado lo vi avanzar hacia el dormitorio, cogió un bolso y empezó a echar ropa; lo seguí y observé en silencio, no supe que decir, me miraba con un odio que no podría describir. Me animé y le pedí que no se fuera, pero sólo me dijo que no soportaba mi mal genio, mi soberbia, mi egoísmo, que estaba harto, lo vi caminar con el bolso al hombro hacia la puerta y le pregunté si estaba seguro, me miró con una mezcla de odio y asco y no dijo nada, simplemente salió de la casa mientras yo me senté en una mesita al lado de la puerta, vi como se alejaba sin voltear, mientras los latidos de mis cuatro meses de embarazo llegaron hasta mi garganta y mis manos intentaron acunarlo como para evitar que se entere de lo que estaba pasando.




Nancy Molina Vargas (hemany)
Nacida en la ciudad de Valdivia, Chile en 1967. Amante de las letras, la música y toda expresión artística, coleccionista de vivencias y soñadora. Publica sus textos en Los cuentos net y quedó selecionada para la Antología Poética de Victor Jara que será publicada en el mes de Mayo.



http://www4.loscuentos.net/cuentos/local/hemany

4 de abril de 2010

COMENTARIO / Carlos Órdenes Pincheira


De Carlos Órdenes Pincheira


REVISTA "LA MANCHA" DE QUILICURA




¿Quién publica, o edita las revistas de poesía?
Nunca un comerciante, eso está más que claro: siempre ha de ser un poeta, un quijote, un hombre que quiere dar a conocer la obra de otros, un hombre que desea levantar una comuna a través de la poesía y las letras en general. Con los primeros números comienzan poco a poco los problemas y, por ende, más dificultades para 3 o 4 (incluido el editor poeta) y las revistas van saliendo a fuerza de corazón. A fuerza de garra y tesón. Pero caramba cuánto cuesta recuperar una parte de lo invertido. Algunos, que han sido publicados, buenos o medianos, empiezan a desaparecer... siendo que ellos tienen el deber moral de adquirir al menos un par de ejemplares donde sus letras aparecen. Es casi increíble, por eso mismo, ahora que veo una revista tan bien presentada, con papel de primera calidad, muy bien impresa, me pregunto: ¿Cómo pudieron sacar una revista de tal calidad? Me refiero a la bella Revista La Mancha de Quilicura.

¿Será que sus integrantes de paso (los publicados), han adquirido al menos unos 5 ejemplares cada uno? Debe haber sido así, pues no me explico de otra manera, porque esta revista, aparte del intenso trabajo de armarla de punta a punta, y luego, imprimirla cuesta su buen dinero. Y lo lógico es que ese dinero se recupere... pero, claro, si en este caso se hizo lo que dije antes respecto a los 5 ejemplares por cada integrante, entonces ¡miel sobre hojuelas!... Ojalá así haya ocurrido.

Revista La Mancha de Quilicura es una bandera de lucha para la comuna, para realzar sus valores y ser orgullo de sus habitantes. Eso quisiera que fuese una realidad. Y no como ocurre y ha ocurrido en cientos de casos que las revistas mueren porque sus propios integrantes no respondieron. Sería una lástima, una enorme pérdida cultural para la comuna de Qulicura que esta bella revista desapareciera. Por lo mismo, el poeta que escribe estas líneas -Carlos Órdenes Pincheira, 24 libros publicados-, solicita a través de estas palabras a la Ilustre Municipalidad de Quilicura un aporte mensual para que estos esforzados escritores, entre ellos Pablo Delgado Ulloa y Amanda Espejo, puedan continuar con tan hermosa labor, lo que sin duda dará mucho más prestigio a la comuna en general.

En este último número, Revista La Mancha contiene numerosos escritos de gran trascendencia,junto a numerosos entusiastas que están buscando un camino.
LA MUNICIPALIDAD DE QUILICURA TIENE LA PALABRA.


Carlos Ordenes Pincheira

Miembro Activo S E C H

www.carlosordenes.blogspot.com

1 de abril de 2010

POESÍA / Gloria Lepilaf Ñonque



LAUTARO


Tierra de mapuches, de poetas,
de notros, castañas, araucarias,
chilcos, vagabundos y carretas.

O’Higgins, es la calle céntrica:
supermercados, fruterías,
bancos, oficinas, un taller de bicicletas,
plazas con bancos de madera
estampados de versos nacidos en primavera,
calles plagadas de niños y jóvenes marcando estilos.

También algunos ancianos, sonriendo ignorados,
caminan, recordando tal vez días lejanos…
Nunca falta, por supuesto algún borracho
culpando a las paredes sus fracasos
y un puñado de cristianos (cada domingo)
predicando de Jesucristo y del fin del siglo.

Algunas escuelas, dos liceos,
al norte el estadio, al sur el municipio y el correo
con cuántos recuerdos en silencio…

“El Cautín”, un río milenario, casi seco
divide en dos sectores a mi pueblo
y a “Guacolda” nos conduce un puente viejo…

Lautaro, tierra de relámpagos y truenos,
de ventoleras y aguaceros de inviernos,
de veranos breves, pero intensos,
día a día, por sus senderos polvorientos
transita su gente, con admiración y respeto,
evocando memorias de un glorioso pasado
y de un toqui llamado Leftraro,
quien heredó a sus hermanos, la fuerza,
la furia y valentía de luchar contra el winka,
por su tierra, su sangre y sus mujeres.

Lautaro, tierra de espigas, de copihues,
de palomas en tejados olvidados
y perros en busca de sus amos.

Lautaro: no enmudecerá el kultrún
ni el purrún dejará de ser bailado.



Gloria Lepilaf Ñonque: "Nací y crecí en la sencilla comunidad del Cacique Antonio Peñeipil, Galvarino. El humo del fuego que nacía a ras del suelo y el viento colado por las hendijas de mi ruka, arrancaron mis primeras lágrimas, esa tibia mañana de Septiembre (13-09-68). Realicé la enseñanza básica en Escuelas rurales y la E. Media en el Liceo B-15 de Lautaro.
Comencé a escribir poesía desde mi adolescencia (aunque tengo algunos escritos de niña), en sus diferentes estilos (romántica, mística, lírica, social, tendiente a la naturaleza, etc), en forma autodidacta. He obtenido premios a nivel regional y comunal. He incursionado en narrativa (Cuentos de estilo costumbrista), donde he obtenido premios a nivel regional y nacional. Pertenezco a la SECH (Sociedad de Escritores de Chile), filial Lautaro y he publicado en revistas literarias “Espigas de Sueños” Lautaro. “Erato”; Collipulli y en la Antología del libro de Cuento y Poesía de FUCOA.
Me autodefino como una mujer sencilla, que ama la simpleza de la vida, a Dios, a su familia, a su pueblo y que he aprendido a convivir en paz y armonía con el Winka".



Publicado en La Mancha 15 / UNO