24 de mayo de 2014

POESÍA / Paz Molina





AQUÍ SE VENDEN FLORES


Los mejores espacios son los trasuntos
del alma
Para reír es preciso haberse equivocado
Los hombres se acostumbran  a veces a sus hijos
y consiguen con ellos grandes parecidos
Tienen fuerza en las manos a punta de mentiras
Aunque no deja de llover
aquí se venden flores.

No hay manera de portarse bien en este mundo
todo cuanto se haga parece fuera de lugar

Hay un piano en la calle bajo la lluvia

Llamen a los bomberos
Las situaciones preciosas
han perdido vigencia
El agua sigue entonando su muerte.



Pág. 81, de “El Libro de la Lluvia” (Ediciones al Viento 2007)



CONDICIÓN Y ALARIDO


Y me ha dado la gana
de ser libre de condición
y de alarido
al medio de la calle
hurtado el cetro a la canalla
oficialmente constituida en mí
me hago presente

Me vierto en mi dominio
de lujoso desvarío virginal
Productores ufanos de quimeras
lánguidos sacristanes
me devoran

Me urjo a lo contrito
y me doy vale de fracaso
triunfalmente acosada
sin menoscabo de lo simple
me convierto en gimnasta
me doy de golpes en el pecho
me transformo en ventana
y me columpio.


TAN SOLAMENTE


Yo rivalizo conmigo:
 No estoy a la altura de mi condición.
 Me topo con sorpresa contra mi propio yo.
 Me sucede que no canto como quisiera.

 Balbuceo y escucho una lejanía.
 Tímidamente me alzo en lluvia.
 Escojo, por no dejar, un nombre para darme.
 Y no me siento interpretada.

 Tan torpe como soy. Tan solamente.
 Tan única y tan ella y tan dolida.
 Y la gran carcajada que me gasto.
 Y las ganas de ser y de quebrarme.

 Rivalizo conmigo y esta pugna
 vagamente grosera me invalida
 las mejores gestiones amatorias.
 Y mi propio amor, mi boca para el beso
 mi discutible condición angélica
 se me van convirtiendo en impostura.

*****



Paz Molina, poeta y novelista, nació en Santiago en 1945. Realizó estudios de Artes y Teatro en la Universidad de Chile y ha participado en diversos talleres literarios, dirigidos por los escritores Miguel Arteche, Pía Barros, Martín Cerda y Jaime Quezada, entre otros. Ella misma ha dirigido talleres y ha desempeñado labores en la Fundación Neruda. Molina es miembro de una generación de escritoras y poetas femeninas que surgió en la década de los 80. mención en Juegos Literarios Gabriela Mistral en 1982 y mención honrosa Andrés Bello en 1983.

Entre sus libros poéticos podemos citar "Memorias de un pájaro asustado", "Noche Valleja", "Cantos de Ciega"; por otra parte, tenemos sus novelas "Paradero 28" y "Apuntes para una sombra", mención en Juegos Literarios Gabriela Mistral en 1982 y mención honrosa Andrés Bello en 1983. Su obra se caracteriza por ser crítica con los valores sociales tradicionales y manifestarse en contra de los convencionalismos; posiblemente sea gracias a ello que el nombre de esta autora no pasa desapercibido para los aficionados a la buena lectura.

1 comentario:

Enrique Dintrans Alarcón dijo...

Felicitaciones por este blog y Revista. Me gusta la marcación de las fuentes y como difunden la obra literaria. Son un aporte.