25 de junio de 2014

LARGA DISTANCIA / Liliana Teresa Chávez, desde Argentina






“Para que las palabras no basten
Es preciso alguna muerte en el corazón”

Alejandra Pizarnik



Adentro, madre
me habitará por siempre el amor.
También sucede
nuestra imperfección.

Hay más silencio
en el propio silencio
más ímpetu
en lo que el grito muestra

y en la lágrima.

Cada cual tiene su paladar

De tragos amargos
se habla siempre.

En lo que a mí concierne
la hiel no se devuelve
se queda
invade
cava
se deja aspirar por la vida

todo el resto del tiempo.



En lo talado
de golpe
un brote insiste.

Como ninguna luna
se resigna menguante
después
de la redondez y el brillo.

A nadie acostumbrado al cielo
se pone boca abajo.


Y a veces la realidad
es una verdad tardía.
Se estanca a los pies del vació
sin ningún fervor
como un borde
a la orilla de sí mismo.

Un pájaro que desde el cielo
cae.


Cómo será
caer en el vacío
no tener un Dios
que de esperanza

mirar alrededor
no ver a nadie
insistir con uno mismo.


El silencio
camina en círculos
bordea la cama
se detiene
en el marco de la puerta

en el Cristo de madera
en su boca.


Sus quejidos
son trozos de vidrio
cayendo de punta.
Llamas
que alcanzan altura
que todo
lo queman

Todo.



Del libro: Dos estaciones y media, páginas 11 – 19.

*****

Liliana Teresa Chávez / narradora y poeta. Nació en Deán Funes, en 1956. Reside en Córdoba Capital. Argentina.

Publicó el poemario “Sobre lo baldío” (Argos, 2009) y participó de numerosas antologías en el país y en el extranjero. 
Integra REMES (Registro Mundial de Escritores en Español) y forma parte del staff del Boletín Literario Basta ya! 
Colaboradora de varias páginas de difusión cultural. Cofundadora de Artistas y Pensadores Independientes (api) e iniciadora - junto a Laura García del Castaño – del Café Literario La Bandada. Conduce desde el 2009 el programa radial Luna de Pájaros por FM Activa de la ciudad de Córdova.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Leer a Liliana Chávez me significa encontrarme con la palabra pensante y emotiva, casi un salmo para meditar sobre la esencia del ser; un gusto encontrarla en un sitio ameno.
Cordial saludo.
Betty Badaui

Anónimo dijo...



Que hermosos poemas, me emociona la belleza de las palabras

Sandra Huespe.