11 de mayo de 2010

LARGA DISTANCIA / Jorge Castañeda desde Río Negro, Argentina


De su obra: PILQUINIYEU
ES UN CHANCHO QUE VUELA...



EL ÁRBOL DE LAS OFRENDAS POBRES



Vienen de un largo cansancio en el alma y en la sangre que viene a ser casi lo mismo. Resisten y sobreviven a una realidad ajena no dándose cuenta que también les incumbe y los involucra a su pesar. Porque son muy semejantes al estropicio y a la nada. Esa nada como vacío del todo. Ese vacío que ocupa la nada de sus días que son siempre iguales a otros días.
A veces dejan las ofrendas a Gualicho: “un viejo sombrero, ya sin copa; una media rota; un chaleco con la espalda rasgada; una lata de sardinas vacía; una vieja camisa; un par de alpargatas terminada ya su vida y su utilidad y varias botellas de bebidas alcohólicas vacías”. Para prosperar, para tener pequeñas esperanzas, para recuperar las creencias.
Son parcos y sufridos como la misma tierra patagónica. Lejos están de aquel escenario agonal de sus antepasados. Como los últimos custodios de una cultura vencida miran pasar la vida que para ellos no tiene ningún sentido.
Están llamados a resistir. A poner todo su celo de guardianes de los últimos secretos. En las tradiciones que son más fuertes que las piedras mesetarias. En los recuerdos de tiempos legendarios cuando los abuelos transmitían otro modo de vivir y de ser.
Cada día que pasa acercan sus desgracias al árbol de las ofrendas como lo hicieron sus antepasados en forma consuetudinaria. Solo que ahora saben que por más que ofrenden y ofrenden jamás tendrán suerte en la vida porque la realidad impiadosa de la modernidad no les concederá tregua ni descanso.
En la balanza falsa de las rentabilidades su cultura pesa poco. Hoy día todo se compra y se vende. La tierra, los pueblos, las lagunas, las montañas, los ríos. Todo. Todo vale para la bolsita del mercader. Tan solo no pueden comprar la dignidad que les queda a los pobladores de Pilqui. Sus tradiciones, sus temores, sus dioses, su linaje. No tienen precio ni tasador que pueda sopesarlas.
No perdonan nada con sus atropellos, conocedores de todas las tropelías escupen el asado que no pueden comer. Jamás entenderán la cosmovisión de pueblos como Pilquiniyeu que tienen otra forma de ver la vida y la naturaleza. La tierra como madre y dueña, los animales como amigos, los ríos y los lagos, los piñones, las plantitas, las estrellas. El todo que los integra e involucra. El sentido de fraternidad que los malos han perdido en un recodo de su mal llamado progreso.
Por eso el nuevo siglo es implacable con los pueblos originarios, con las civilizaciones tradicionales, con los últimos arcanos.
Por eso ellos saben y resisten. Y esperan. Y miran en silencio. Sin comentarios. Sin que se mueva un gesto de sus rostros sufridos. Esperan. Esperan como siempre lo hicieron. El tiempo de renuevos. La esperanza de la parición, la fiesta del año nuevo que no es el libertinaje de gula y ebriedad de los blancos y la adoración de los falsos dioses del mercado y del consumo. Esperan porque intuyen que deben resistir. Porque los mansos recibirán la tierra por heredad. Por eso esperan, como las vírgenes prudentes con sus lámparas encendidas entre los pedreros pobres de Pilquiniyeu.




CANCION PARA MI RIO


Quiero mojar mis manos en el río
su agua fresca bajando del Limay
viajar en las lanchitas por sus aguas
buscar el sol en su boca de sal.
Nostalgia del Río Negro en la comarca
de frutas y manzanas me hablará
su corazón perfuma en las riberas
como mis penas sus aguas se van.
Quiero dejar mis horas en tu cauce
hablando de mis cosas al pasar
me saludan los sauces y los mimbres
y esta vida con ganas de soñar.
En la arteria de tus aguas quedaré
y en tus olas su espuma de cristal
como pasa el caudal de tu corriente
pasan también mis años que se van.




Jorge Castañeda
Valcheta (RN)



JORGE CASTAÑEDA. Poeta, escritor y periodista argentino nacido de padres rionegrinos en la ciudad de Bahía Blanca y radicado en Valcheta, provincia de Río Negro.
Ha publicado los siguientes libros: “La ciudad y otros poemas”, “Poemas breves”, “30 poemas”, “Poemas sureños”, “Sentir patagónico”, “Los atabales del tiempo”, “Valcheta, un pueblo con historia” y “Suma Patagónica”, “Pilquiniyeu es un chancho que vuela” edición digital “Que de libros” Ediciones, “Por la vida y por la Patria” Poemas edición digital “Que de libros” ediciones.
Tiene inéditos: “El lirio de los valles”, “Crónicas & Crónicas”, “Donde llora el ornitorrinco”.
Figura en varias antologías tanto nacionales como extranjeras, habiendo recibido numerosos premios por su obra literaria.


http://jorgecastaneda.fullblog.com.ar

Fotografía superior del arroyo Valcheta ( nace y se abastece del agua de la reseva en la meseta que en su parte superior se encuentra el paraje Chipauquil).

2 comentarios:

Jorge dijo...

Estimada amiga: Han quedado estupendos los textos y muy buena la revista. Salió todo muy bien y contento de estrechar vínculos culturales a traves de la palabra.

Muchas gracias y mi mayor afecto.

Jorge Castañeda
N. Descalzi sn
(8536) Valcheta (RN)
R. Argentina.

Anónimo dijo...

Tu rio me invita a soñar... lindo poema.
hemany