30 de octubre de 2008

EL LIBRERO / de Bernardo Astudillo / Mario Benedetti

EL AMOR, LAS MUJERES Y LA VIDA de Mario Benedetti




TÁCTICA Y ESTRATEGIA
Mi táctica es
mirarte
aprender como
sos quererte como sos
Mi táctica es
hablarte y escucharte
y construir con palabras
un puente indestructible
Mi táctica es
quedarme en tu recuerdo no se como,
ni se con qué pretexto
pero quedarme en vos
Mi táctica es
ser franco y saber
que sos franca
y que no nos vendamos simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos
Mi estrategia es en cambio
más profunda
y más simple
mi estrategia es que un día cualquiera
no se como, ni se con qué pretexto
por fin me necesites.




Mario Benedetti en la orilla vecina
Por BERNARDO ASTUDILLO



Hablar de Benedetti es hablar del héroe urbano, aquel que puebla las calles y las oficinas, el hombre común que todos conocemos. Tanto en poesía como en narrativa, Benedetti reboza humanidad, cercanía. Sus poemas, en su mayoría de tendencia social, abordan los temas de su tiempo, pero sin caer en lo panfletario, en lo burdo. Sus poemas de amor, pequeñas obras maestras de cotidianeidad, son reflejos de nosotros mismos, seres humanos sin mayores pretensiones que dejan en los versos un retazo de piel. Difícilmente Benedetti llegará a ser un poeta mayor, ya que su poesía carece de las triquiñuelas de los poetas mayores. Benedetti está contento con ser un poeta menor, según su decir. Bien por él y tanto mejor para nosotros, simples lectores que buscamos un oasis de paz en medio del vendaval de mal llamada poesía con la que nos bombardean todos los días. Leer a Benedetti es ser espectador y protagonista de la vida común, no carente de significado o filosofía, pero ¿quién se resiste a decir a la amada: compañera usted sabe que puede contar conmigo/ no hasta dos o hasta diez/ sino contar conmigo?, o mejor aún: te quiero porque sos mi amor, mi cómplice y todo/ y en la calle codo a codo/ somos mucho más que dos? En fin, mucho se podría hablar de Benedetti, de su múltiple obra, tanto narrativa como poética, de su humor, de su ingenio. Faltarían palabras y sobrarían conceptos, pero como la función de la literatura es revelar al personaje y ocultar al autor, qué mejor que abrir un libro de este uruguayo y simplemente disfrutar.


* Comentario publicado en La Mancha número cinco.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Benedetti es, a decir de muchos y gracias a Dios, un poeta "menor", si con ello se entiende el que no pertenezca al rebaño de vacas sagradas que se apropia sin ningún remordimiento de los campos públicos.
Ojalá hubiesen muchos má como él.
Buen texto el que lo presenta.

Marcial H.