En el marco del Segundo Encuentro con el Libro Chileno, en Iquique, tuve la ocasión de conocer, admirar e intercambiar publicaciones con el Taller Literario VERBALÍA, grupo dirigido por Pedro Marambio y bajo el patrocinio de la Universidad Arturo Prat. Este taller conformado por mujeres de variadas edades, hace un trabajo serio, rico en sensibilidades y en matices, con la gracia impagable de quienes no se han mareado ni maleado todavía con el roce de las esferas literarias. Esa frescura e ingenuidad impregnada en sus creaciones, empapan ineludiblemente al lector-espectador en cada una de las presentaciones que - bajo el ojo experto de su director Pedro Marambio - han realizado en distintos lugares del país, y en las cuales se atreven a conjugar distintas formas de expresión al alero de la literatura, tales como la actuación y la fotografía.
Bello es el resultado de todo aquello y digno de imitar y compartir. Como una pequeña muestra, un par de textos de el libro que me fue obsequiado a cambio de nuestras “manchas”: La Noche que Floreció el Ciruelo, de Ediciones Campvs, Universidad Arturo Prat.
“El árbol del ciruelo anuncia la primavera con sus flores de septiembre. Las mujeres anunciamos nuestra eterna primavera a través de nuestro quehacer. Siempre recurrimos a los recuerdos de la niñez cuando queremos abrir el secreto cajón de los aromas, sensaciones, risas y juegos que nada hacen presagiar el futuro que nos convierte en mujer...”
Presentación de Miriam Salinas Pozo
Ediciones Campvs
Ediciones Campvs
CIRUELOS EN FLOR
¡Ciruelos en flor!
Jardín de mil cuentos
y los pinos altos acunando el cielo.
Núbolas desfilan en ejércitos etéreos
siguiendo dragones que se van
corriendo
y van transformándose en barcas,
en ciervos, en dulces corderos.
Me dejo hechizar por la tarde que viaja
en sutiles tonos de verde y dorados,
por cojín nevadas y dedales de oro.
Levito en un tiempo de viento y cometas,
los cerros dormitan,
la vida murmura
y el río muy quedo entre sostenidos
y bemoles, canta.
Las malvas me forman cierres y atalayas,
así nadie puede encontrar mis senderos
senderos del alba, de neblinas claras
senderos de noches con la luna en calma
tapizando todo con su luz de Nilo.
Casi oigo serpientes y grullas dormidas.
Otros son ahora los colores ciertos,
otras las mañanas de cansancio eterno
otras son las noches perfume a temores.
¿Dónde se habrá ido la descaza huidiza?
que no me di cuenta ni siquiera cuándo
ya no miré el cielo,
ya no vi las nubes,
no están los ciruelos.
¿Es posible hallarla, llamarla de nuevo?
Quiero mis ciruelos.
Edna Fernández
INFANCIA
Infancia, leo en mi diccionario
palabra sobre la cual construimos
la vida.
invade para siempre todos nuestros
sentidos
frágil como las últimas estrellas del
rocío
fuerte como las rocas que a orilla de
los mares
amparan a los pájaros que construyen
sus nidos.
Infancia es la palabra que se acuna en
tus brazos
con la ternura de un recuerdo
dormido.
Lidia Olivares
1 comentario:
muy buenas plumas has traído!!
Felicitaciones Amanda
este intercambio de seguro dará buenos platos para degustar
besitos liricogastronómicus:=)
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